Capítulo 2289
Capítulo 2289
El Manantial de Regeneración
Jaime no quería hablar demasiado de las sectas ocultas.
Cecilia saludó a Arconte y Alba con una sonrisa, y ellos le correspondieron.
Sabiendo que Arconte y Alba sentían curiosidad por todo, Jaime les dio tiempo para explorar.
—Vayan ahora a dar un paseo por la Secta Duval. Partiremos cuando haya hecho los preparativos necesarios —dijo.
El dúo asintió y se marchó mientras Jaime controlaba a Forero y Giovanni.
—Arconte, Ciudad de Jade es enorme. Sólo el terreno que ocupa la Secta Duval tiene que ser mucho más grande que nuestra Secta Luminosa —comentó Alba, asombrada por la gran arquitectura de la Secta Duval. NôvelDrama.Org © content.
—Todo esto son posesiones mundanas. Como artistas marciales, debemos centrarnos en el cultivo. La Secta Duval puede parecer majestuosa, pero ¿no te has dado cuenta de que la gente de aquí no sirve para nada? Son todos más débiles que cualquiera de nosotros, de la Secta Luminosa, puede acabar con ellos con facilidad —replicó Arconte con desdén.
Aunque estaba igual de impresionado por el magnífico entorno y los edificios de la Secta Duval, era demasiado arrogante para admitirlo.
Por eso desvió a propósito la atención de Alba para que se centrara en sus capacidades.
Con eso, Alba no dijo nada más. Los dos siguieron caminando, disfrutando del paisaje de la Secta Duval.
En cuanto a Jaime, se fue en avión y voló a Campo Quásar después de examinar las heridas de Forero y Giovanni.
Al principio, quería dar a Arconte y Alba un día para explorar Ciudad de Jade como es debido, pero el estado de Forero y Giovanni le hizo darse cuenta de que el tiempo era esencial. No había lugar para retrasos.
Por eso aún tenía que buscar a Casio y asistir a la Conferencia del Reino Secreto una vez que estuviera seguro de que los dos hombres estaban en buenas manos.
Jaime tenía conocimientos limitados sobre las familias del reino secreto, en especial sobre las capacidades de las sectas y las familias prestigiosas.
También sabía que tarde o temprano tendría que entrar en el reino secreto. Por lo tanto, familiarizarse con esas familias de antemano le proporcionaría mayores beneficios en el futuro.
Más importante aún, Jaime quería reunirse con la gente del Palacio de la Nube Violeta. En ese momento, no sabía si su madre seguía allí.
Después de todo, el Palacio de la Nube Violeta se encontraba en el reino secreto. El hecho de que Jaime no pudiera entrar porque no sabía dónde estaba la entrada le impedía obtener información sobre su madre.
Lo único que podía hacer era probar suerte y reunir información valiosa sobre el paradero de su madre durante la Conferencia del Reino Secreto.
El avión llegó a Campo Quásar sin demora. En cuanto Mateo recibió la noticia de la llegada de Jaime, de inmediato envió a sus hombres al aeropuerto para recoger a éste y a su grupo.
Forero y Giovanni sufrieron heridas graves, con los huesos y los ligamentos rotos. Aunque lograron sobrevivir, quedaron inmóviles, dependientes de los demás para apoyarse y moverse.
—Jaime, ¿dónde estamos? —Giovanni era incapaz de mover el cuerpo, pero conservaba la capacidad de ver y hablar.
—Estamos en la Secta Luminosa. Más tarde los llevaré al Manantial de Regeneración, que curará sus huesos y ligamentos —le explicó Jaime a Giovanni.
—¿El Manantial de Regeneración? ¿Qué es eso? —preguntó el forastero.
—Es un manantial extremadamente mágico. Sólo necesitas sumergirte en él durante cuarenta y nueve días para que tus heridas sanen por completo. Me costó mucho esfuerzo localizar el manantial. Quiero que ambos se relajen y no se preocupen por nada. Mientras yo esté aquí, les juro que recuperarán la capacidad de andar —aseguró Jaime a Forero.
Tras ponerse en contacto con Isaac, llevó a Forero y a Giovanni directo al Manantial de Regeneración.
Mateo también ordenó a sus discípulos que siguieran a Jaime y a su grupo para protegerlos.
Dado que Forero y Giovanni tendrían que permanecer en el Manantial de Regeneración durante cuarenta y nueve días, hacía tiempo que Isaac había retirado a sus hombres de allí. En consecuencia, la responsabilidad de salvaguardar el manantial recaía sobre los hombros de la Secta Luminosa.
Jaime ayudó a Forero y Giovanni a remojarse en el manantial antes de meterse él mismo y respirar hondo para activar su campo de elixir. Sintiendo el flujo del agua del manantial, comenzó a cultivar en silencio.