Capítulo 777
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Capítulo777
Mateo, al escuchar estas palabras, volvió a cambiar su mirada hacia Leona. Afortunadamente, Rodrigo tenia un buen gusto y no se fijó en esta mujer insolente y loca que tenía delante. ¡De lo contrario, sería una verdadera desgracia para la familia!
Leona se enfureció y miró fijamente, mientras Jimena se reía friamente: -No importa cuánto te resistas, no puedes hacer nada al respecto. Mi hermano simplemente no siente atracción por ti, y, eso tú lo sabes.
1. ti. ¿ Leona se sujetó el pecho, enojada, y se rio con rabia: -Mi hermano tampoco siente atracción por
verdad?
Esta vez, Jimena se llenó de ira.
Cuando llegué, vi el bugatti veyron de edición limitada de Clara estacionado frente a la mansión.
Parece que ella ya está aqui, ¿verdad?
Leona se puso una mano en la cintura y bostező, -Vi que mi hermano no está aquí. ¿Se fue con Clara y
te dejó plantada de nuevo? ¿Qué lástima?
–
-¡Leona! Jimena tenía los ojos enrojecidos y deseaba poder abalanzarse sobre ella y rasgarle la boca.
-Jimena, asi es mi hermano. Te acostumbrarás a él cuando te cases con él en el futuro. Si algún día lo
llegas a hacer..
Leona se volvía más entusiasta a medida que hablaba: -Cuando se casó con Clara, aún tenía a Beatriz en su mente. Cuando esté contigo, también pensará en Clara. Asi son los hombres. Tienen una mujer virtuosa en casa, pero siguen anhelando a las mujeres de afuera Clara tardó tres años en adaptarse. Si te gusta tanto mi hermano, también deberías poder adaptarte a su sistema de vida. Todos quedaron.
atónitos, sus ojos estaban a punto de salirse de las órbitas.
Si no fuera por la presencia de los ancianos de ambas familias, Jimena y Leona ya se habrían agarrado
del pelo y peleado como dos fieras.
¡Leona! ¿Has bebido demasiado? ¿Estás diciendo cosas sin sentido?
Ema estaba a punto de explotar de ira, su presión arterial subia y gritaba con la cara roja: -¡Lleva a Leona
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arriba de inmediato!
-¡Alejandro! ¡Sueltame! ¡Déjame ir!
Alejandro avanzó como el viento, y Clara lo siguió a regañadientes, con la muñeca dolorida por su firme agarre. Parecia estar muy enojado, o tal vez, llevaba mucho tiempo enfurecido y finalmente encontró una salida para desahogarse, y que mejor que hacerlo con -Clara.Ccontent © exclusive by Nô/vel(D)ra/ma.Org.
-¿A dónde me estás llevando? – Clara preguntó furiosa, con sus ojos enrojecidos de ira.
-Fuiste mi esposa, este lugar fue tu hogar durante tres años. Conoces cada rincón de esta casa mejor que yo. ¿A dónde más crees que podría llevarte? – Alejandro no se volteó, su voz temblaba y cada palabra parecia masticada por la rabia.
-Alejandro, eres demasiado engreído. ¿Crees que me conoces tan bien? – Clara de repente levantó la muñeca y mordió con saña el brazo del hombre.
Alejandro sintió un dolor punzante y, de manera instintiva, soltó su agarre. Clara retrocedió de inmediato, agarrándose la muñeca marcada con una marca roja y lo miró con resentimiento y rabia. - Nunca consideré este lugar como mi hogar. No he sentido que me pertenece ni un solo día. Para mí, este lugar siempre fue una terrible prisión.
Sin embargo, la prisión que una vez la atrapó no fue su cuerpo, sino su corazón.
Alejandro sintió como si un cuchillo lo retorciera por dentro. A pesar de estar furioso con ella, todavía experimentaba una intensa sensación de dolor. Sus ojos color almendra se entrecerraron ligeramente, y dio un paso adelante, aprovechando la distracción de Clara, Rodeó su delgada cintura con su brazo fuerte y, de repente, la levantó en sus brazos. Con gran fuerza y amor..
Clara gritó sorprendida y, al segundo siguiente, se encontró acurrucada en sus brazos, agarrando instintivamente la solapa de su camis