!Canalla ¿Satisfecho con mi muerte?

Capítulo 97

Claro que no esperaba que la familia Linares le fuera a extender la vida a la abuela de Ainara, pero una vez que me enteré de las verdaderas intenciones de Alfredo, tenia todo calculado.

Alfredo pensó que yo seguia siendo aquella Ainara fácil de manipular, pero estaba muy equivocado.

La Ainara de antes tal vez tendría cariño por Alfredo y su esposa, y se sentiria atada por lazos familiares, Please check at N/ôvel(D)rama.Org.

pero yo no.

Mis padres murieron en un accidente de carro cuando yo tenia dieciocho años, y en cuanto a Alfredo y su esposa, para mi no merecian llamarse padres.

“Papa, te equivocas, lo que quiero decir es que ahora soy la cabeza de la familia Linares. Aunque Felipe vaya a regresar al pais, ya sufrió un derrame cerebral y no tiene mucho poder. Ese tal Federico ni siquiera puede despertar, asi que ahora todos en la familia Linares tienen que escucharme, dije con una sonrisa, apresurándome a aclarar.

Alfredo gruño y entrecerró los ojos. “La familia Galindo te ha criado durante tantos años, aunque regresaste a los dieciocho, te hemos educado desde entonces. Tu madre y yo somos tus padres biológicos, tenemos un vinculo de sangre. Lo que le sucede a uno en la familia, nos afecta a todos, tienes que tenerlo claro.”

Asenti rápidamente. “Papá, yo entiendo todo.”

Alfredo asintió. “Ahora todavía tenemos que pensar en una manera de apoderarnos del Grupo Linares lo antes posible. Ese Braulio se está apoderando de la compañía, y poco a poco nos va a arrebatar todo. No van a ser compasivos contigo.”

“¿Papa, tienes algún plan?” pregunté en voz baja.

Alfredo me miró. “Planea cómo puedes colocar a tu hermana dentro del Grupo Linares. Llegaste muy tarde y tu educación no está al nivel, no sabes manejar, no tienes habilidades. Si colocamos a tu hermana alli para que te ayude, y una vez que ella se haga un lugar en la empresa, le pasas las acciones que tienes a ella.”

Lo miré con una sonrisa irónica, como si las cuentas del ábaco estuvieran rebotando en mi cara.

¿Por qué debería yo darle mis acciones a Adela?

Me da risa solo de pensarlo…

“Papá, no es tan fácil meter a alguien en el Grupo Linares. SI Adela es tan capaz, debe entrar por sus propios méritos. Nunca he tenido contacto con la compañía, ¿cómo voy a saber cómo colocar a alguien?” dije suavemente. “Si Adela ni siquiera puede pasar la entrevista en el Grupo Linares ¿cómo va a asumir esa responsabilidad y ganarse la confianza de todos?”

Suspiré. “Papá, también estoy pensando en nuestro gran plan, ¿qué te parece?”

Alfredo me miró y asintió. “Está bien, yo me encargaré de eso. Tú prepárate para allanarle el camino a tu hermana y a Patricio Garcia.”

Me quedé callada, y Alfredo habló de nuevo. “Ainara, ahora también eres parte de la familla Linares, hay cosas en las que debes ceder a tu hermana, tú y Patricio no estaban destinados a estar juntos.”

Me burlé en el fondo de mi corazón, sin decir nada.

Se dice que Patricio, el novio de Ainara, es una segunda generación rica, pero la familia Garcia obviamente no ha sido muy buena con ellos en los últimos años, y Patricio no tiene ninguna habilidad, asi que sus planes también incluian apuntar hacia la familia Linares

Ja, qué audacia.

*Si no hay nada más que decir, puedes irte, prepárate bien“, me dijo Alfredo, despidiéndome con un gesto.

Levante una ceja, ¿qué clase de padre era este? Me llamaba para volver y ni siquiera me ofrecia un vaso de

agua…

Adela robo et novio de Ainara, y yo tenía que ayudarla a entrar en el Grupo Linares, Incluso tenía que darle mis acciones y ayudar a un desgraciado.

Cuando estaba en la familia Hierro, solamente sentia que Renán me maltrataba, vivia de la caridad de otros y aguantaba para no recibir más golpes.

Pero eso no significa que sea tonta.

Nunca me imaginé que la familia Galindo sería tan descarada para tratar a algulen como si fuera un tonto. Esto me mostraba cuan miserable y sin derechos habla sido la vida de Alnara en esta familia durante todos estos años.

“Bueno, si no hay nada más, me retiro.” Me levante, eché un vistazo al reloj y me di la vuelta para marcharme.